¿Qué es el paladar hendido?

El paladar hendido es una malformación que se genera entre la sexta y la novena semana de embarazo, ya que el tejido que forma el paladar no llega a unirse por alguna de las partes. Esto puede desembocar en que las funciones que tienen que ver con la boca (hablar, comer, beber, etc.) se vean resentidas.
Para poder definir correctamente el alcance de esta malformación, es imprescindible acudir al dentista. Este será capaz de analizar el caso de forma personalizada y establecer el tratamiento más adecuado para cada paciente.
Cómo tratar la malformación del paladar hendido
Generalmente, se recomienda encarecidamente la intervención quirúrgica, ya que permite restablecer buena parte de las funciones y minimizar el impacto estético. La primera fase del tratamiento tiene lugar en el periodo neonatal (cirugía primaria), mientras que según va creciendo el niño se atajan los problemas asociados que afectan principalmente a la adquisición y desarrollo del habla.
La odontología puede ayudar de forma considerable en casos de hipoplasia maxilar superior, ya que mejora las condiciones del paciente mediante la cirugía ortognática o el uso del hueso interpuesto. Es posible que se necesite la acción de otros especialistas, ya que en ocasiones surgen complicaciones en la respiración, fonación o audición.
Como es lógico, a la hora de pronosticar entran en juego numerosos factores. Sin duda, el más importante es actuar con la mayor premura posible para comenzar el tratamiento de forma efectiva. Además, realizar un seguimiento periódico de la evolución del paciente es crucial para poder adaptarse a las características de cada caso.
Consecuencias del labio leporino o paladar hendido
El paladar hendido no es un problema menor, puesto que afecta a funciones de gran importancia para el ser humano, como el habla o la masticación. En ese sentido, las clínicas dentales especializadas son uno de los pilares para conseguir reducir las molestias que puede crear. Además, cuando las características morfológicas del paciente impidan que el desarrollo cognitivo concuerde con las capacidades físicas necesarias para hablar correctamente, es posible que se planteen otras intervenciones quirúrgicas.
Uno de los problemas del labio leporino es que, como otras malformaciones congénitas, no siempre se puede saber el origen. Puede ser parte de un síndrome o estar relacionado con el embarazo de la madre, como puede ser una deficiencia de vitaminas o la exposición al tabaco. De todos modos, aunque se presenten problemas dentales, se pueden mejorar mediante la práctica de buenos hábitos como el cepillado correcto o las visitas periódicas al dentista.
Tratamiento odontológico
Los profesionales de Abaden nos encargamos de colocar los aparatos de ortodoncia más adecuados para cada caso. De esta manera, según van creciendo los dientes permanentes, se puede corregir su posición.
De igual forma, hay casos en que se necesita un injerto de hueso para rellenar el espacio que existe en la zona gingival superior. Así se consigue una mayor fijación y estabilidad.
Una vez el paciente llega a la adolescencia se puede optar por intervenciones estéticas que disimulen las marcas que quedan en la nariz y la mandíbula. Esta clase de cirugía no solo tiene una función visual, sino que puede mejorar cómo respira y habla el afectado.
Bibliografía
- https://www.medigraphic.com/pdfs/actmed/am-2019/am194j.pdf