¿Por qué cambiamos los dientes de leche?

Los dientes primarios o más comúnmente conocidos como dientes de leche se empiezan a formar dentro del vientre materno. Cuando el niño nace tiene, dentro del hueso de la mandíbula, los brotes de los que serán los 20 dientes que usará hasta que los dientes definitivos salgan y hagan caer a los de leche.
Los dientes de leche
Estos pequeños dientes de los niños sirven para que puedan aprender a masticar y comer alimentos sólidos, para su buena nutrición, y también para que puedan comenzar a pronunciar bien las palabras. Los dientes de leche comienzan a salir a los 6 o 7 meses de edad hasta los 3 años.
Como cualquiera puede apreciar, los niños a esa edad tienen una cara y boca pequeñas, por ese motivo los dientes y sus raíces son pequeños, porque sino no entrarían ni servirían para sus funciones.
La formación de la dentadura
Los dientes, una vez formados, no crecen más de tamaño. Cuando los dientes de leche asoman por las encías no es que crezcan, sólo se desarrolla la raíz y los dientes se van “acomodando” en la arcada.
Una vez en su sitio, el tamaño de los dientes es siempre el mismo y son los huesos maxilares los que crecen hasta que nos desarrollamos completamente. Por eso, cuando se completa la erupción de los dientes de leche, sólo son 20 y más pequeños que los definitivos, que son 32. Y, cuando el cuerpo crece, se cambian los dientes de leche por los definitivos, que son más numerosos y más grandes.
La caída de los dientes de leche
La caída de los dientes de leche suele empezar alrededor de los cinco o seis años, en un proceso largo hasta lograr la dentadura definitiva. A medida que los dientes definitivos crecen y empiezan a salir de la encías, presionan a los de leche, aflojándolos poco a poco y desgastando sus raíces hasta que éstos últimos se desprenden. Cuando se caen los dientes de leche, dejan un hueco por donde aparece el diente nuevo.
A eso de los 14 años, la mayoría de los niños ya han perdido todos los dientes de leche, y tienen los primeros 28 permanentes. Hacia los 20 años pueden comenzar a salir las famosas muelas de juicio, completando el total de dientes en 32.
¿Qué hacer cuando empieza a moverse un diente?
Nuestra recomendación es no forzarlo, debido a que puede pasar bastante tiempo desde que empieza a moverse hasta que se cae y los movimientos pueden dañar el diente definitivo o la encía. Trae a tu hij@ a las revisiones anuales para que su dentista de Abaden compruebe que está en el periodo de recambio dental que le toca.
Llama a nuestro asesor dental al 900 102 969 si quieres recibir más información sobre esta u otras cuestiones.