“Sin duda la mejor decisión que tomé de ponerme en manos de este pedazo equipo, después de un año y con la pandemia de por medio (implantes, prótesis fija y brackets) solo puedo dar las gracias desde el que te recibe en la puerta hasta que sales por ella. En mi caso olvidé reir sin taparme con la mano, olvidé una foto con la boca abierta, olvidé un bocadillo, olvidé una bolsa de pipas. GRACIAS!!! Por hacerme perder el miedo, por secarme las lágrimas al sentarme sin ni tan siquiera tocarme, gracias por calmar mi ansiedad, por recuperar la confianza y la sonrisa. Sin duda os recomiendo ciegamente porque el no pasar dolor ni en el más mínimo momento hace que todo sea más fácil. Comer desde el primer dia, sonreír desde el primer dia, el proceso ha sido excelente y la recuperación doblemente excelente. Vuestras llamadas de preocupación y de seguimiento se agradecen no sabéis cuanto. Gracias por hacerme sentir única y no un número.” NOEMÍ