¿Qué es la deglución atípica? ¿Con qué tratamientos se corrige?

¿Qué es la deglución atípica? ¿Con qué tratamientos se corrige?
Índice 1.- ¿Qué es la deglución atípica?2.- Síntomas de la deglución atípica3.- Causas de la deglución atípica4.- Consecuencias de la deglución atípica5.- ¿Cómo corregir la deglución atípica?5.1.- 1- Ortodoncia interceptiva5.2.- 2- Terapia miofuncional5.3.- 3- Ortodoncia

La deglución atípica es una de las principales alteraciones bucodentales que presentan los niños. Y, en consecuencia, es una de las que tratamos con mayor frecuencia en las clínicas dentales Abaden.

Por ello, hoy hemos preparado un artículo en el que te vamos a contar qué es la deglución atípica y cómo se corrige. Pero, sobre todo, te vamos a contar qué hábitos se deben eliminar durante la infancia para evitar que aparezca.

¿Qué es la deglución atípica?

La deglución atípica es una alteración que consiste en colocar la lengua en una posición inadecuada mientras se degluten (tragan) los alimentos. De esta manera, la persona con deglución atípica se caracteriza por presentar el hábito involuntario de colocar la lengua sobre sus incisivos superiores o inferiores.

Con ello, ejerce un movimiento de presión que, aunque parezca inofensivo, hace que los dientes se vayan desplazando hacia delante. Este hecho, además, cobra especial sentido en la infancia, una etapa de la vida en la que tanto los dientes como los huesos maxilares son muy “moldeables”. Por ello, los desplazamientos se producen con mayor facilidad.

Síntomas de la deglución atípica

La deglución atípica puede provocar una serie de síntomas inespecíficos. Es decir, que pueden corresponder a otra alteración. Sin embargo, algunos signos que presenta son muy característicos:

  • Los dientes de la arcada superior e inferior no contactan entre ellos. Esto es una maloclusión que se conoce con el nombre de mordida abierta.
  • Cuando está en reposo (sin hablar o comer) la lengua no descansa sobre el paladar, sino sobre los dientes.
  • Tiempo de masticación excesivo: la persona tiene dificultades para deglutir determinados alimentos, generalmente, los más duros.
  • Respiración bucal, en lugar de nasal.
  • Dificultades para pronunciar determinadas palabras correctamente.

Mordida abierta por deglución atípica

Causas de la deglución atípica

Normalmente, la deglución atípica se origina en la infancia y se produce como consecuencia de hábitos inadecuados en los niños. A continuación, vamos a detallar las principales causas de la deglución atípica:

  • Succión prolongada del dedo pulgar: si los niños se chupan el dedo más allá de los tres años, es posible que desarrollen deglución atípica.
  • Uso excesivo del biberón o del chupete: junto con la anterior, es la principal causa de deglución atípica.
  • Crecimiento incorrecto de los huesos maxilares: sucede cuando el maxilar superior o la mandíbula se desarrollan de manera inadecuada (por exceso o por defecto).
  • Anquiloglosia: se produce cuando el niño tiene un frenillo corto, lo que impide que pueda mover su lengua con normalidad.
  • Macroglosia: aunque es una causa menos frecuente, la macroglosia también puede provocar deglución atípica. Se produce cuando la lengua presenta un tamaño más grande del habitual.

Consecuencias de la deglución atípica

La deglución atípica ocasiona una serie de consecuencias negativas:

  • Movimientos inadecuados de los dientes: una de las primeras consecuencias de la deglución atípica es que los dientes (incisivos superiores o inferiores) se desplazan hacia delante.
  • Maloclusiones dentales: la deglución atípica da lugar a una serie de alteraciones. Algunos ejemplos de esto son la mordida abierta, la protrusión dental (dientes superiores que están muy por delante de los inferiores) y los diastemas (separaciones entre dientes).
  • Complicaciones en el proceso de digestión: las personas que no degluten correctamente el bolo alimenticio pueden experimentar digestiones más pesadas.
  • Problemas a la hora de pronunciar determinados fonemas: lo más habitual es tener dificultades a la hora de pronunciar con claridad los sonidos /d/,/t/,/l/,/n/ o /r/.

¿Cómo corregir la deglución atípica?

Los principales tratamientos para corregir la deglución atípica son tres: la ortodoncia interceptiva, la terapia miofuncional y la ortodoncia. El uso de un tratamiento u otro dependerá, fundamentalmente, de la edad que tenga el paciente.

Por ello, es fundamental acudir al ortodoncista tan pronto como se sospeche la existencia de deglución atípica.

1- Ortodoncia interceptiva

La ortodoncia interceptiva es un tratamiento dirigido a niños de entre 6 y 9 años, aproximadamente. Dado que a esta edad las bases óseas (huesos) de los dientes son muy “moldeables” resulta relativamente sencillo acabar con la deglución atípica y corregir las maloclusiones dentales que haya provocado (mordida abierta, protrusión dental, etc.).

Pero, además, durante la infancia será posible combinar el tratamiento interceptivo con otro igualmente exitoso: la terapia miofuncional.

2- Terapia miofuncional

La terapia miofuncional es aplicada por un logopeda y consiste en una serie de técnicas y ejercicios encaminados a eliminar los hábitos nocivos del niño.

El logopeda, por tanto, tendrá el objetivo de “reeducar” al niño para que aprenda a realizar correctamente acciones cotidianas como respirar, masticar, deglutir o pronunciar.

3- Ortodoncia

La ortodoncia es el tratamiento que permite corregir la deglución atípica en adultos. Y es que, aunque la alteración se origine en la infancia, lo cierto es que, si no se corrige, la persona llegará a la edad adulta con ella.

La ortodoncia -ya sea con brackets o con alineadores transparentes– servirá para corregir las consecuencias de la deglución atípica en los dientes (mordida abierta, protrusión dental, diastemas…).

Su principal diferencia respecto al tratamiento interceptivo es que la ortodoncia de adultos tardará más tiempo en corregir las maloclusiones dentales. Y puede que, en algún caso, no logre eliminarlas por completo.

Esto se debe a que, como ya hemos repetido, las personas adultas que han concluido su crecimiento óseo ya no presentan huesos “moldeables”.

Por todo ello, nunca nos cansaremos de repetir a nuestros pacientes que la mejor manera de corregir una maloclusión dental -cualquiera que sea- es durante la infancia.

Y, para evitar que las maloclusiones pasen desapercibidas, lo más adecuado es que los padres lleven a sus hijos por primera vez al ortodoncista a los seis años. De esta manera, el profesional podrá detectar cualquier anomalía tanto en los dientes como en los huesos del niño.

Dra. Laura Obradors
Dra. Laura Obradors

Ortodoncista y especialista en Prótesis / Directora Médica en Abaden Dentistas

Licenciada en Odontología | Universitat Internacional de Catalunya.

Máster Damon | Clases impartidas por los Doctores Ramón Perera y Rafael García-Espejo

Máster Invisalign | Manuel Román Academy

Máster en Terapia Neural y Odontología Neurofocal | Universitat de Barcelona